viernes, 12 de febrero de 2016

¿Por qué nos dejamos meter el dedo si sabemos que este país no existe?

¿Por qué nos dejamos meter el dedo si sabemos que este país no existe?


Acuña no es ingeniero, ni doctor, ni maestro, aunque tiene el título de todo eso, sabemos que no es nada de eso, se ve muy fácil en su manera de hablar, pero sabemos algo más Acuña es peruano y eso no existe, un país soportado en el  papel, en el mapa, nada más que eso así que qué más da ¿Seamos falsos seámoslo siempre?
Estamos en choliwood, todo es como en un estudio de cine de clase C, basta que tú entres a una institución, la que quieras y veras que nada es real, que todos actúan su papel sin mayor brío sin verdaderamente creérselo, quizás esto fue así desde la colonia más pienso que antes se cuidaban las formas, nos metían el dedo y hasta el fondo, pero sin tanto desparpajo y cinismo.
No se trata de Acuña se trata de todo el país, aquí no hay realidad, aquí se perdió el ser, todo es una metida de dedo, y lo peor es que en un estado de corrupción pareciera que nos gusta este tipo de violación, y que para lo único que realmente nos preparan desde niños es para meterle el dedo a los demás.
Pase por un colegio, el cual no era colegio, la única educación que recibe fue la del insulto, el bulling y la hipocresía, luego entre a un grupo de teatro, que no era un grupo de teatro, que pregonaba una radicalidad de cuatro tablas, pero que lo habría  dado todo por el reconocimiento de la pequeña elite cultural burguesa limeña, luego pase a una escuela de teatro del estado, que no era nada de eso, al estado jamás le ha interesado el arte o la cultura, la mediocridad, y miseria era el pan de cada día, luego trabaje en la universidad Católica la Pucp, donde me maltrataron sistemáticamente, como ya se sabrá esa universidad de Católica no tiene nada y de universidad menos, ayer fui a la muestra de los egresados de la facultad de arte y de arte no había nada, ingenuidad, copia, la clásica rastreria del alumno que quiere ser aprobado, tomando las ideas relamidas de su profesor sin aportar nada, sin mayor conocimiento de la historia del arte, sin saber que todo lo que habían hecho ya se había hecho ya se había dicho de una mucho mejor manera, lo mejor que vi fue un cuadro al óleo del dibujo animado esto es aventura en el que se pintó al rey de hielo, y la carrera de diseño industrial, nada lo único rescatable los monstruos sociales, donde de la manera más condescendiente se retrataban sus taras sociales en una campaña para lograr valores y el diseño digital , peor, nada, todo es la copia mal hecha de lo que ya se ha hecho y esta gente paga un montón de plata por un crédito, para que les metan el dedo y les digan que son artistas y para que luego ellos nos metan el dedo y nos digan a nosotros que son artistas y nos traten como mierda cuando posemos como modelos para su cuadros.
En mi recorrido he visto tantas y tantas metidas de dedo como esta, pero es que acaso no lo hemos visto todos, Fujimori nos metía la yuca no el dedo la yuca hasta el fondo y elevo la mentira de nuestra nación a niveles surrealistas, los vladi videos que nos muestran, que lo que realmente tenemos es una chacra o más bien lo que realmente tienen, los que lotizan nuestro territorio, vivimos en una chacra, con sus grandes desiertos y sus selvas y por supuesto sus burbujas, ahí está Miraflores, veo a la gente andar y están fresh, súper frescos y frescas, del hambre, la violencia, el odio del que bebo todos los días en el centro de lima, ellos no saben nada, caminan estirados y regias, como por sobre huevos súper light, la mentira de nuestra nación se cae por todos lados pero ellos han optado por botar del distrito a todo aquel que intente perturbarlos, ya no hay mendigos, ya no hay informales, todo está en orden, nada ni nadie denuncia la mentira de la burbuja en la que viven, y si te atreves a perturbar su orden los serenos te caen al segundo con sus cámaras por todo lado, mas basta caminar por las noches para ver que el distrito se pudre en cucarachas.

Choca, choca verdaderamente ver la diferencia que hay entre Miraflores y San juan de Lurigancho y de hecho choca mucho más ver la diferencia que hay entre lima y el centro del Perú o el Sur y que decir del oriente, este no es una nación, ¿un chongo? Quizás la palabra Perú es tan enigmática parece un koan zen, de pronto entramos a la iluminación y nos damos cuenta que quizás no sea solo nuestro país, sino que todo el mundo es falso, que el olvido del ser que denunciaba Heidegger, aquí se resume, en la chicha banalidad, donde los egos se inflan como grandes sapos sin tener cuando reventar, pero me pregunto si hubiera una guerra ¿Que pasaría? Terminaríamos anexados a Chile, Brasil, Bolivia, o por fin dejaríamos de llamarnos nación, para declararnos tierra de nadie.

Pero acaso nunca hubo nada de verdad en este país, y la respuesta es que si lo hubo, y lo verdadero fue vilmente castigado, ahí está Mariátegui, Vallejo, Arguedas y su suicidio oh Dios su suicidio ahora quizás puedo entenderlo, en mi recorrido he intentado hacer teatro de verdad, y lo que he recibido son insultos al más alto calibre, intente hacer arte de verdad y la gente poco a poco me fue dejando solo y voy a ver en lo que están mis excompañeros y más mentiras y más negocios, mas metida de dedo yo le prometí a mi amigo que jamás dejaría que se convirtiera en uno más de aquellos mentirosos que se dicen actores teatrista y que de verdad no son nada, pero mi amigo se dice maestro y solo es alguien más que mete el dedo y que hace sus clases por plata, me siento con otro amigo para que me cuente sobre el teatro peruano y lo que hay es una vampirizacion del isil plaza, cualquier cosa que da alguna luz de existencia es consumida al momento siendo degollada en esta sala, el resultado es una generación de teatristas yupis que solo quieren hacer carrera y aparentar y luego me cuenta de las escuelas de teatro, Roberto ángeles una súper metida de dedo, la escuela de Coco chiarela una recontra medita de dedo, la escuela de Bruno odar, al parecer te meten la mano completa, la de Alberto Isola es la metida de dedo consagrado, solo me dice que la escuela de David Carrillo, trata de lograr cierta honestidad preocupándose por que sus actores realmente actúen, pero en qué? En comedias re frívolas al estilo americano, en conclusión el teatro está muerto, y en esa muerte los muertos que recuerdan su muerte siguen siendo los reyes, los yuyas, en un tiempo estuvieron vivos hoy viene de su memoria, y saben capitalizarla saben meternos el dedo, y la danza terrible todos quieren ser Mirella carbone, y sacer sus rollos personales o regocijarse con su pequeñas miserias, de danza no hay nada, pero en esa nada hay una cierta inestabilidad que deja la esperanza para que suceda algo, pero sucederá?

Si me preguntan en que consiste mi sacra revolución consiste en revelar el ser, que no es otra cosa que hacer las cosas de verdad, con todo el compromiso que eso exige, con todo el sacrificio y la constancia de hormiga artesanal que eso exige, ¿lo he logrado?, no yo también soy parte de esa mentira, pero en algunos momentos tengo unos raptos de locura, de inspiración donde verdaderamente barro con todo, Hoy intento hacer filosofía en la plaza San Martin, después de ver que era imposible hacerla en la facultad de teología, lo intento hacer en la plaza y es tan difícil, recuerdo que en la universidad no se podía leer, leer realmente a los autores todo era manual, o el texto de otro autor que trataba de simplificarte la lectura de los filósofos y mis compañeros felices de no hacer filosofía, religiosos de todas las ordenes que lo único que querían era pasar de año, y que se pasaban los exámenes de los años anteriores para poder hacerlo, esto era sistemático en la facultad, jamás olvidare esa presentación de tesis de Doctorado de un Afro francés, el cual tenía un pésimo texto, con faltas ortográficas, faltas de redacción, presentado de la peor manera, con una tesis re ingenua sin ninguna  investigación y a la cual el jurado aprobó sin problemas , solo hacía falta el pago y punto ya eras doctor en teología, pues no, no, no,  no ,no yo me revelo ante eso, y trato , trato de estudiar de verdad,  voy y leo mis libros en la plaza, trato de estudiarlos lentamente, como ese chileno que lee la fenomenología del espíritu de Hegel en un curso de varios años sin importarle el tiempo, solo le interesa conocer , conocer realmente el pensamiento del filósofo, y eso es lo que quiero y de pronto a mi llega un libro como de Georg Simmel problemas fundamentales de la filosofía y yo me emociono leo lentamente por fin un  libro que me ayude a introducirme a la filosofía y su primer problema saber que es la filosofía en que radica su esencia si es que la tiene, y leo, en voz alta y ahí vienen los “marxistas” a atacarme como todos los días con sui chácharas vacías, que solo hay dos filosofías, que soy un idealista y demás demás, pero cuando leo y pregunto que han entendido, no han entendido nada, porque realmente no hay nada en ellos son los falsos revolucionarios, los que repiten el disco rayado una y otra vez, una y otra vez sin cansarse de su  propia mentira, yo sigo leyendo, y sigo preguntando y se van por fin avergonzados por lo menos aún tiene cierto pudor ante su ignorancia, pero luego vienen los “liberales pragmáticos”, entre comillas porque en el Perú no hay nada eso todo es una copia chicha de las ideología europeas, realmente no hay ningún compromiso con ellas de lo que se trata es de existir, de decir algo, de ocupar el espacio  y que piden que haga ejemplos prácticos que si la filosofía no sirve para la práctica para que seguimos leyendo y a mí no me queda más que retirarme con los que verdaderamente están interesados no en los chicharrones sino en el chancho y dejo, dejo a la masa, para que les sigan metiendo el dedo, yo no quiero hacerlo, por fin me pongo a leer y me cae el serenazgo que no puedo en la vía publica hacer un taller de filosofía que guarde mi cartel, hay un huevo de carteles en la plaza pero es a mí al que jode, sabe que aquí si hay algo verdadero, sabe que el verdadero acto subversivo es este, el hacer las cosas de verdad y jode, jode y no me deja continuar, yo no me rindo, pero los jóvenes que me acompañan se van asustados, me quedo solo, intento enseñarle al jefe de los serenos que no se va pero no hay mejor manera de ahuyentarlo que esa, tratando de enseñarle de verdad filosofía.
Eso es lo más anti peruano que pueda haber, hacer las cosas de verdad no meterle el dedo a la gente, ese es el crimen que me ha costado la expulsión de mi colegio, de la escuela de teatro, de la facultad de teología y la exclusión de todos los espacios en los que he estado, así que esta es la verdadera revolución hagamos las cosas de verdad, más si nos atreviéramos habría que destruir toda la mentira y eso pasaría por destruir todo este país y cada una de sus instituciones tanto estatales como particulares empezando por la Iglesia ¿Lo hacemos? Y luego por fin construir un País verdadero, real, ¿lo hacemos?

Sé que la respuesta es que no que ustedes quieren que les sigan metiendo el dedo, pero yo no solo quiero meterles el dedo, yo quiero meterles todo mi ser y que ustedes me metan todo su ser hasta más allá de la muerte. ¿Lo hacemos? 

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